El rechazo del contacto físico es uno de los mitos que hay sobre el trastorno del espectro del autismo. Se suele asociar el autismo a personas poco cariñosas, cuando en realidad no es así.
Para diagnosticar autismo no hacen falta este tipo de pruebas. Puede ser útil o importante hacerlas en algunos casos para identificar la causa del trastorno, para consejo genético o para filiar las comorbilidades.
Las personas con trastorno del espectro del autismo pueden dedicar muchas horas a actividades que son de su interés. Estas actividades pueden ser más o menos complejas, pero lo cierto es que les relajan y les resultan placenteras.
Lo más importante es recordar que el diagnóstico no cambia la relación que tenéis. Seguramente te ayudará a encontrar una explicación a algunas situaciones que antes parecían no tenerla.